Quién está detrás
Lote 3 no es una empresa.
Es una finca. Una parcela concreta. Es un terreno con historia. Y ahora es también un aceite que va en cubo rosa.
Hoy somos nosotras —tres hermanas— quienes lo impulsamos.
Pero no es un proyecto familiar al uso.
Es una elección. Una forma de hacer las cosas con cuidado, sin ruido, y con diseño.
Aquí está Romeo, que vive en la finca y conoce cada árbol.
Está mi padre, Pedro, que la ha trabajado toda su vida, y que aún pasa por allí, observa, pregunta, opina.
Sabe cosas que nadie más sabe.
Y estoy yo, María. Con una idea clara: que un producto puede ser bueno por dentro y por fuera.
Y que, si lo es, merece contarse bien.